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Autenticidad

03 de febrero del 2014

Desde hoy quiero ser único.  En serio deseo ser único. Es más ya hice mi relación de cosas que debo hacer para sentirme único y excepcional. Comienza así:

1) Empezaré por lo más superficial. Botaré todos los estropajos de mi ropero e iré de shopping. Me buscaré ropa más casual. Tal vez me compre algún saco de color kaki que quedaría perfecto con una camisa de cuadritos, además por allí que me compro un chalequito.  También compraré pantalones más ceñidos, jeans o de colores con tonos serios. ¡Hey! Y No olvidaré de unas zapatillas, tal vez unas Supra, esas me las mandaré a traer por Ebay; o unos zapatos mas sport elegantes, esos los consigo en Polvos Azules.


Esa ropa se vería bien en mi escultural cuerpo.



2) Una vez obtenida la ropa, necesitaré algo directamente físico. Eso se refleja en un buen corte de cabello. Debería quitarme ese plumero que tengo en la cabeza y optar por un estilo contemporáneo. Creo que me quedaría fantástico cortarme bien pegado a los costados de la cabeza y dejar en el medio cabello para poder estilizarlo. Eso estaría perfecto.

Tal vez no quede así, pero voy por buen camino.

3) Ropa, apariencia física, pues supongo que después vienen los accesorios. Me compraré un reloj plateado, o negro, o de colores, en fin creo que aquí todo vale. Botaré mis lentes antiguo y conseguiré unos a lo ‘Buddy Holly’. También me conseguiré un collar, este si debe ser plateado obligatoriamente, y unas pulsera masculinas con frases filosóficas.

Joder, amo a este tipo.


4) Bueno, una vez conseguido todo el caparazón, explotaré mi talento y mis costumbres únicas. Y debo ir por lo que más pega. Podría inscribirme en clases de narración literaria, también a lecciones de guitarra o canto. Me compraré vinilos de The Beatles, The Smiths, Radiohead, Joy Division, Oasis, Led Zeppelin, y porque no, de Pearl Jam, Guns n’ Roses y Metallica. También iré a una librería con un carrito y meteré todos los libros de fantasía y ciencia ficción que pueda. Adicional a ello, me compraré cerros de dvds de películas de cine independiente. Si me animo a ir más lejos tal vez me inscriba a clases Skate (que por cierto SÍ existían), de Urban Dance (vaya que es único), teatro (esto es autenticidad pura) o de dibujo y pintura (esto es ser dios). Por cierto, olvidaba que siempre debo sentirme un post-hippie de la nueva era. Todo esto me perfilará como una persona con un estilo de vida alternativo. Fuck yeah!

Seré demasiado auntentico


5) Será importante recordar también, que cuando tenga todo, me debo tomar 1232134234454345567 fotos con Retrica y 1242432534654667677 selfies para el perfil de FB y el Instagram, y por allí fácil  que me voy a un estudio fotográfico  a sacarme fotos ÚNICAS. Hablando de redes sociales, también debería tener como costumbre escribir en mi Face cada dos horas, frases o pedazos de canciones, y cuando ocurra algún evento mundial de gran importancia, debo dar mi opinión, pues esta no tendrá comparación. Con todo ello no espero menos de 100 likes por segundo.


Great!





6)  ¡Listo para demostrar mi autenticidad!




28 de abril del 2014

Hoy tengo y práctico todas las cosas que había planeado hace ya poco más de dos meses.  Pero cabreado y no me siento nada único.  Una vez que terminé de hacerme el 1242432534654667677-AVO selfie,  me decidí por subir todo a mi FB. Y como había predicho, los likes subieron como la espuma. Por allí también me escribieron varios comentarios, en los cuales casi siempre se repetía la palabra ‘Hipster’. -¿Hipster?- Me pregunté. Hice una breve investigación por la red y encontré esto:










Por la PUTAMADRE, he gastado casi todos mis ahorros para poder ser diferente y único entre los demás y lo ÚNICO que al final conseguí solo fue ingresar a una “tribu urbana” o “subcultura” en la cual sus integrantes se creen los outsiders de la sociedad. Que estúpido fui, ahora hasta los marginados se juntan entre marginados para poder hacer una moda en la cual ser independientes es bacán. Odio todo eso, lo detesto, botaré toda esa porquería de ropa, esos vinilos, dejaré de asistir a esos malditos talleres. Insultaré a cualquiera que vea con lentes de Buddy Holly, le partiré la cara a quien lleve ese cortecito de rapado a los costados, arremeteré contra cualquiera que hable de las bandas que a mí me gustaban, haré todo lo políticamente incorrecto que existe en este podrido sistema. Así por lo menos seré más único que los bastardos’ hipsters’ ¡Sí Eso haré! ¡Odio todo!!Odio a todos!


29 de abril del 2014

Ya no hay solución, hoy me meto un tiro...






 THE END




Hoy se me dio por escribir en vez de amanecerme viendo porno estudiando para mi examen de Microeconomía. Creo que es algo bueno y productivo desde algún punto de vista. De todas formas, no me preocupo mucho por Micro, total,  ya sé casi todos los temas...










Los dejo con Bizarre love triangle de New Order. Este sencillo lanzado en 1986 tiene un sonido muy característico que te transporta automáticamente a la década de los 80', así no hayas vivido en ella. 

Les escribió Joss!, amante de las chaquetas. ¡¡¡Hasta la próxima!!!





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Conversaciones nada santas 1: Escondido

Te esperé hasta muy tarde hoy
parado en una esquina como si vendiera mi cuerpo
me sentía incómodo que me vieran tan solo
pero estaba dispuesto a soportar todo.

Te esperé hasta muy tarde hoy
Tenía ganas de invitarte a salir.
Pero nunca respondiste mis llamadas
Tal vez olvidaste tu móvil.

Te esperé hasta muy tarde hoy
Deseaba tomarme una foto contigo
Quería verte sonreír
Y sentir que esta tarde era nuestra

Te esperé hasta muy tarde hoy
Pero nunca saliste
Y me sentía como alguien que vende su alma
Por un poco de compresión

Te esperé hasta muy tarde hoy
Solo deseaba verte pasar
Pero es incómodo estar parado allí tan solo
Eso me enojó


Pero al final te entendí
Sé que nadie te espera
Nadie a tu lado anda
No me conoces, pero yo te acompaño todos los días

No tenías derecho a dejarme esperando allí




¿Alguna vez has acosado a alguien?- le pregunté mientras yo me servía un trago del combinado-. Claro, ¿sabes? es algo excitante hacerlo, siempre y cuando la persona acosada no lo sepa- me respondió mientras sonreía y botaba el humo de sus pulmones-. Explícate bien basura, ya sabes: ¿quién? ¿cómo? y ¿cuando?- el tema me causó mucha inquietud-. Pues recuerdo que yo estaba en el último año de cole, estaba mirando por una de las ventanas de mi casa, solo eso, no más, y de la nada se aparece esa 'tipita', vestida como alguien que va alguna entrevista de trabajo. Me gustaron sus piernas y la forma como caminaba. De la nada me salió esta idea de seguirla un rato por la calle. Ella solo caminaba y yo iba en la otra vereda viendo como se desenvolvía con su entorno, como esquivaba los baches de la vereda, como esperaba la luz verde para cruzar. También vi si se rascaba la nariz, o hacia donde miraba. La pobre no se dio cuenta nunca que yo iba atrás. Yo me sentía un asesino serial, de esos que salen en las pelis y que acechan a su victima y que en el momento menos pensado ¡juaz! le rebana el cuello. Obviamente yo no iba a hacer ninguna estupidez, pero era así de 'adrenalínico'. Después de un rato me aburrí y la deje de perseguir. Aunque luego me quedo ese 'bichito' de intentarlo otra vez. Y pues lo hice, acosé a dos de mis compañeritas que me gustaban del salón sólo por diversión, aunque en algunos momentos fui más lejos. Por ejemplo, a una de ellas la llamaba solo para escuchar su voz. A la otra le metí cartas con frases y su nombre por debajo de la puerta de su casa. Una vez en la privacidad de mi cuarto me reía como un maldito enfermo. Nunca me descubrieron, a pesar de que ello fue un tema de conversación en algunas reuniones de padres, a pesar de que lo hice por 3 meses. Yo creo que el gusto de acosar a alguien se basa en que tu te sientes la persona que está detrás de lo que le pase en la vida de la victima. Algo así como tomar las riendas de su destino por un momento y moldearlo según tu placer, después ver como reacciona con cada hecho y reírte de que nadie siquiera sospecha de ti. ¿Quién se levanta un día pensando que le dejarán cartas anónimas por debajo de la puerta de su casa ? ¿Quién se levanta pensando que un día llamarán toda la noche y no contestarán? ¿Quién despierta un día por la mañana pensando en que algún loco ha dibujado su rostro en una de las paredes exteriores del colegio? ¿O escrito su nombre en todas las bancas de un parque aledaño? ¡¿Quién carajos se levanta un día pensando que mientras divisa la calle por una de sus ventanas de su casa verá a una chica con buenas piernas que lo conducirá a una breve locura temporal?!
A veces eres muy siniestro Lombardo, tomate lo que queda para abrir el red label- dije mientras me paraba a buscar la botella, yo ya no quería hablar más del tema.

Si ya sé, hace días que no escribía ni un punto en el blog. Pero volví hoy, a horas de un asqueroso examen de Introducción al Derecho, que por cierto no rendiré pues no he leído ni una sola lectura en estas 6 semanas. No es porque sea un flojo e inculto que no le gusta leer, sino que los temas a tratar en el curso son, disculpenme la palabra, huevadas de un fumeque con terno. Eso sí, no puedo negar que mi profesor es lo máximo y hace muy entretenidas las clases. En fin, algo haré para remontar...

Los dejo con Radiohead y la canción Fake Plastic Trees de su segundo álbum The Bends. Lanzada en 1995, esta canción tiene una melodía muy deprimente con una letra, a mi parecer, algo rara. No obstante, los versos pueden convertirse en un cortavenas absoluto si uno sabe interpretarlos. 

Les escribió Joss!, el que no va a los exámenes. ¡¡¡Hasta la próxima!!!








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Pequeñas cosas...

¡Vaya! Una semana sin publicar... y es que los exámenes en la UPC, por más que sean los primeros, son demasiado fastidiosos. No obstante, no fue una tan mala semana: fui al Lima Colors Night Lights y la pasé de la 'putamare'. Pero bueno, no voy a dar una crónica de aquello (para eso visiten páginas especializadas en conciertos). Hoy deseo sincerarme un poco con todos los/las extraños/as...


Pequeñas cosas

En esta vida hay pequeñas cosas que me afectan mucho. Me instan a perder el control. Fomentan mi inexplicable odio hacía el resto. Y el resto lo conforman todos. Descontrolarme solo me convierte en una persona desgraciada, pues termino repudiando a gente que antes quería, o deshaciéndome de cosas que para mí tenían mucho significado. Fantaseo un poco con vengarme. Diseño planes maquiavélicos con los cuales pretendo demostrar que soy un poco mejor, que me han subestimado. Pienso que no hay mejor placer que ver las caras de las personas que aborreces al enterarse que soy mucho mejor que ellos. Sonrío. Me sumerjo un par de veces en mi siniestra imaginación, antes de notar que soy insignificante. Que aún no tengo derecho de pisotear a nadie, pues soy alguien de montón. ¿Quién eres tú para burlarte de mi?, en mis sueños, oigo decir a todos aquellos que están en mi lista negra. Y me encojo. Me siento desagradable. Tengo sed de éxito. Pienso que por conseguirlo, podría pisotear la cabeza de quien sea. No me importaría nada. Pero me vuelvo a ver en el espejo, y comprendo que todo lo que pienso no tiene sentido. Es violencia gratuita. No tiene ningún fin. Comprendo que es parte del enojo al que he sometido a mi mente. Ya no me importa que me hayan mentido, ni que me hayan insultado, ni que me hayan rechazado, ni que me hayan golpeado, ni que me hayan dejado en visto, ni que no me tomen en cuenta. Al final quiero a todos de nuevo. Me arreglo frente al espejo, y me marcho.


¡Hey! tranquilo , no todo lo que escribo es acerca de mi. A veces tomo solo un fragmento de mi personalidad y lo maximizo o lo minimizo tanto como mis ganas y mi imaginación me lo permitan. En fin, al parecer se me ha vuelto costumbre publicar por las madrugadas. En lo personal, creo que es un momento ideal para hacer muchas cosas, tales como jugar Playstation, practicar matemáticas, escuchar música, pensar en la chica que te gusta o fantasear que tienen una vida con ella. Pero NO, NO es el momento indicado ni para leer, ni para hacer el amor. Sobre todo no es ideal para hacer esto último. No se quién se habrá inventado eso de 'pasar la noche' pero...a esas horas da flojera de estar dando vueltas alrededor de la cama, la bulla se escucha en todo el vecindario y hace demasiado frío para bañarse (por lo menos en esta temporada en Lima); o si sudas, pues estas sudando encima del lugar donde dormiras LOL. Es mejor esperar hasta el amanecer y ver que pasa...

Los dejo con Julian Casablancas. El vocalista de The Strokes nos presenta, haya por el 2009, su primer (y único hasta la fecha) álbum solista Phrazes for the Young. De este trabajo se desprende el single 11th Dimension, lanzado el 2 de octubre del mismo año.  Una muy buena canción que habla en tono de sátira sobre la decadencia del mundo y los séres humanos. Paradójico que el show que dio Casablancas en el Lima Colors Night Lights estuvo decaído. 
BA DUM TSS. 

Les escribió Joss!, amante de los mañaneros. ¡¡¡Hasta la próxima!!!






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¡Brillante!

Debido a que sigo con un millón de cosas que hacer, no he podido escribir nada nuevo. Sin embargo eso no quiere decir que dejaré a mi blog sin una entrada nueva. Acudo a mi maletín de recursos de reserva y les desempolvo un texto que escribí hace aproximadamente un año. Fue parte del curso de Narrativa, dictada por el siempre elegante y refinado Raúl Tola en los salones del Centro Cultural PUCP. De seguro él ya se olvidó de mí, pero yo jamás olvidaré sus clases ni la forma como resolvía todas mis interrogantes en cuanto a la narración de cuentos. Debo admitir que lo enseñado por Raúl cambió mi perspectiva de ver la creación literaria... En fin, menos nostalgia y más acción. El siguiente cuento corto consta de ocho "minicapitulos", los cuales subiré en dos tandas de cuatro capítulos cada una. ¡Disfrútenlo!

¡Brillante!

Ya es tarde, nadie esperará a un alma que pronto morirá,
avanzarán sin mí y será en vano llegar allí.

Yo



Capítulo I: Una piña en la cabeza
El hombre que está a mi lado trata de contener su risa ¡Y cómo no! Le he dado un show esplendido al estrellar mi frente en el asiento delantero. No obstante, este incidente ha sido una salvación, pues ya me he pasado dos paraderos, y francamente, con el sueño que tengo; el bus podía llegar hasta Nazaret y yo ni enterado. Mientras dormía, mi cerebro proyectaba una terrible película de horror, una de esas que te estremecen hasta los huesos, de la cual sólo deseas escapar y no volverla a pensar jamás. Sin embargo, después de observar a mi alrededor, preferiría volver a internarme en mis sueños, por más descabellados que sean. Esta carcocha está repleta de gente y el bochorno es insoportable. En los asientos posteriores, están un par de ‘fresitas’ hablando de que tan grande la tienen sus enamorados. El modo de hablar de ambas me causa indigestión. Utilizan al por mayor aquel ‘manyas’ que tanto detesto; que chiquillas tan despreciables, apuesto mi colección de comics a que ni saben que significa. Cerca al medio, está una de esas tías con bebé alquilado (fácilmente es la quinta que se sube al micro) cantando una de esas insoportables canciones en quechua, que obviamente, son una sinfonía al lado de esa basura de reggaetón que acaba de poner un narizón con gorra y pinta de piraña sentado en el asiento de atrás. Cosas como estas hacen que un golpe de cabeza sea una caricia al lado de la jaqueca que te causan. Asqueado me paro y empiezo a empujar a todos hasta llegar a la puerta, la cual se abre, liberándome.

Capítulo II: Frenillos
Dejo atrás aquel zobaquiento bus, veo la hora en mi celular mientras empiezo el recorrido de esta gran avenida. Faltan dos minutos para el inicio de mis clases y estoy como a dos kilómetros de mi instituto, y a menos que camine un kilómetro por minuto, llegaré extremadamente tarde.
“Como escribir historias fascinantes” es el título de mi taller, y me vienen dando tips para poder escribir alguna novela que hace mucho quería plasmar en hojas. Es dictado por un conocido cronista, al cual puedo ver sonriente en un gigantesco anuncio situado cuadras más abajo como parte de la propaganda del diario que él dirige, y que nunca compro, no porque tenga mala información, sino porque no trae horóscopo. Él ha pedido  a la clase escribir un relato acerca de alguna anécdota. Yo ahora no tengo ni la más mínima idea de lo que escribiré pero haré el esfuerzo por impresionarlo un poco.
He llegado a la cuadra del anuncio de mi profesor, y se me da por observarlo sin detener mis piernas ¿Es posible tener los dientes tan blancos y parejos? ¿O sólo trata de mostrarme lo más encantador de él? Tal vez no sabe nada y solo me está ‘cabeceando’ el dinero con el cual podría comprarme unos cuantos juguetes más para mi colección.
No tengo, dinero para poder tomar un taxi, además he notado que por aquí no pasa ningún tipo de transporte público. Bueno, pues así poco a poco se van las ganas de querer llegar. Vamos, es sólo un taller, nunca me pondrán calificación alguna, no revisarán aquello que podía escribir, y es más, mi grandioso profesor ni siquiera sabe mi nombre.





Capítulo III: Otro camino
El sol se va ocultando, muchos edificios son tocados por su brillo agonizante. No obstante, hay uno que resalta entre los demás, “Libertad” es su nombre, no es el más alto de la capital, pero tiene una peculiaridad que hasta ahora ninguna otra construcción a copiado. En el lado iluminado por el ocaso dibujaron un ojo gigante con detalles bastante realistas, la pupila tiene ciertos colores especiales que brillan al reflejar la luz del atardecer. Es hermoso; si lo ves, te da una extraña sensación, como si alguien, en algún lugar de esta triste ciudad, está contemplando maravillado la caída del astro más brillante.
Yo aún veo a “Libertad” muy lejos, pero esta allí y me seduce, deseo ir. Nunca he subido al último piso, hoy estoy decidido a hacerlo. No tengo nada más que hacer, marcaré un camino hacia la Libertad.

Capítulo IV: Ser brillante

El viento sopla fuerte, cada cuadra me hace un peinado diferente. Este lado de la ciudad es bien guapo, puedo ver todo más ordenado, limpio y decente ¡Hasta hay basureros en cada esquina! Esto si me gusta, mis sentidos perciben que la contaminación ambiental de esta inmunda ciudad ha quedado atrás y he llegado a un lugar mejor. Lo único que me disgusta de por aquí es la gente, me siento asfixiado al ver a tantos ‘yuppies’; esos tipejos con ternito, camisa blanca y corbata que creen que el mundo es una empresa en la cual siempre tienen que estar formales; salir de sus trabajos. Además también detesto esos carros elegantes con lunas polarizadas y a los conductores de estos, manejan pésimo y se dan el lujo de mentarte a la madre y ningunearte cuando tú estas manejando un tico y les reclamas algo. Como odio a ese tipo de gente.
Camino entre la multitud, invisible, todos pasan  y nunca reparan en mi, empujando, viendo sus relojes, hablando de sus grandezas y nunca de sus derrotas. Yo soy uno más allí, desconocido, sin una luz que me ilumine, ni un cartel que diga que soy alguien. Puedo hacer cosas grandes, mucho más que sólo terminar una carrera que  desprecio, mucho más que ir con terno a una empresa donde pasaré el resto de mi vida tragando papeles de marketing y negocios, mucho más que sólo escribir cuentos llenos de resentimiento y culpa. Deseo ser alguien que deje una marca en alguna vida, deseo sentir que he logrado algo. Yo deseo…
Ese chirrido que te irrita los oídos de las llantas de un automóvil frenando en seco se escucha en toda la cuadra y rompe mis pensamientos de forma abrupta. En un solo parpadeo, una camioneta se estrella contra un puesto de periódicos, haciéndolo añicos. El conductor, un joven que baja con cara de imbécil del carro y con una mano en la frente, debe tener muy mal gusto como para pegar esos stickers de niño meando y sacando el dedo medio en la maletera. Mucha gente se acerca al lugar, como siempre, este es un país lleno de mirones. Una mujer empieza a gritar pidiendo auxilio, cree que la vendedora esta bajo las llantas. En fin esto es tan común en la capital, que no me impresiona ver estas escenas, a pesar de ser la primera vez que observo de cerca un accidente. Estoy cansado de ir por esta interminable avenida, así que busco con los ojos un pasaje por el cual entrar, según recuerdo; por aquí cerca hay un parque que antes me gustaba recorrer. Sigo mi camino, no sin antes escuchar que otra mujer empieza a gritar, esta vez insultos de grueso calibre, es la vendedora de periódicos tratando de lincha al conductor responsable de hacer volar por los aires su puesto.

CONTINUARÁ...




Bueno eso es todo por ahora, ya son casi las 6 am y mi maldito insomnio no me deja cerrar los ojos para nada. Creo que necesito medicarme. Y hablando de medicamentos, los dejo con la canción Meds de la banda Placebo, la cual en un par de días dará un concierto junto a Julian Casablancas (de The Strokes) y Pixies como parte del festival Lima Color Night Lights. Obviamente, su humilde narrador estará presente en dicho evento, el cual se perfila como uno de los mejores de este año. En fin, lanzado en octubre del 2006, Meds es el cuarto y último sencillo del álbum homónimo. Con un vídeo bastante polémico y unas letras que queman, es una excelente canción de fondo cuando tomas un antidepresivo o te pasas de vueltas en una fiesta (yo lo escuche en ambas ocasiones, y funciona jaja). 

Les escribió Joss!, más noctambulo que Batman, Drácula y un Búho juntos. ¡¡¡Hasta la próxima!!!


















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Mosqueado

Así es. Estos días voy a estar mosqueado con todas las lecturas que tengo que repasar para mis prácticas de la próxima semana (justo cuando abro mi blog, viene un papelito con preguntas y me malea los planes), por lo que decidí hacer algo muy mono: dejaré posteado mi primer trabajo que me pidieron en el Taller de Creatividad de mi carrera, el cual consistía en escribir una entrada en un blog creado por nosotros. Mi página llevaba por nombre ToDreamstown*, y no voy a negarlo; estaba planeando continuarla regularmente, pero al final desistí. La tarea mencionada fue escrita allá por el año 2012 cuando era un ingenuo cachimbo de la UPC que deseaba dar lo mejor de si y ser amigable con todos; antes de que aprendiera a no confiar en nadie cuando hago una asignación grupal; antes de que me vaya a la "trica" en Marketing y estar a un pelo de que me boten de una patada de esa selva llamada UNIVERSIDAD. Esta narración parece haber sido hecha por alguien que acaba de tomarse un litro de café y haberse fumado una cajetilla de 20 Marlboros rojos. Por allí me dijeron que el fin de aquella tarea fue ver que tantas sustancias toxicas hay en las venas de los recién ingresados. Pero bueno, me inspiré e hice algo que no suelo hacer muy seguido: meter más metáforas que la sazón que mete Tego Calderón...
*Lo menciono por si alguna vez a alguien se le ocurre estrellarme el copyright en la nariz.

La ciudad y la conquista del tiempo.-

El rey sol esta muriendo con el paso de los minutos, desaparece tras las altas colinas aledañas a La ciudad de Caraz; no sin antes dejar un hermoso espectáculo, imperceptible para quienes lo viven día a día; extraordinario para quienes le ponen atención a cada detalle de la vida, o para aquellos que pocas veces pisan aquellas tierras.


Con un último esfuerzo, los rayos del gran astro entibia las calles; sin embargo, comienza a ser vencido por los fuertes vientos provenientes de la costa. Al sentirse cansado comienza a desvanecerse, acariciando por ultima vez en el día a la ciudad, sus praderas y sus ríos.
El Huandoy y el Huascarán, al reflejar con sus capas blancas la luz de aquella gran estrella, son los primeros que empiezan a hundirse en la oscuridad; ocultándose así, la majestuosidad de los dos nevados.
Mientras el minutero de un reloj avanza, también lo hace la oscuridad, quien ahora se encuentra a las puertas de Caraz, dispuesta a consumirla por completo una vez más. El sol vencido se retira irremediablemente besando el suelo que la penumbra pisa. Muchos rayos de luz se aferran a estatuas, ventanas o a árboles de níspero; mas se quiebran al poco tiempo, cayendo sus restos en el tejado de las casas.
Aquel astro, sabe que resucitará y tendrá su revancha pronto y tan solo dormirá pon unas horas.


Caraz ahora es dominada por la oscuridad, quien reina soberanamente en cada paraje creyendo en la gran duración de su imperio. No obstante, las manecillas de un reloj incita a los humanos a levantarse en contra de ella, y estos obedientes encienden la luz que ellos han creado. Pues así, con velas, bombillas, lámparas y grande postes iluminadores, diezman a las fuerzas de la oscuridad, dejándolas aisladas en diversos lugares, en las que solo esperará ajustar cuentas con el paso de las horas.


Los Hombre se sienten libres de opresiones y caminan despreocupados, mucho sin recordar las batallas antes vividas, ni el espectáculo agonizante que realizó el sol. Algunos caminan lento por las calles de Caraz, observando las estrellas que dibujan.
Algunos caminan rápido y preocupados, pues el reloj los impulsa una vez más a realizar diversas acciones;
otros extrañan a quienes no han visto desde hace muchas horas.
Pero sólo aquellos que caminan lento, mirando las estrellas y los dibujos que forman estas, podrán notar las amenazas que se aproximan.


Nubes negras se acercan, dispuestas con gotas de lluvia a acabar con todo. las nubes presumen su fuerza rugiendo fuertemente dando a entender que ya tomaron ciudades aledañas.
Ante esto, los habitantes de Caraz saben que serán sometidos una vez más; aunque el optimismo y creatividad de muchos de ellos no se ve vulnerado.


En la ciudad se ve a quienes las nubes solo sólo es una proposición para poder salir y disfrutar la lluvia:
Un beso bajo ella, una fotografía de los ríos que se forman en las calles, un poema inspirado por ella, una familia reunida, una gran compañía para quien llora y se siente solo.


La siniestra nube negra, al ver la felicidad que puede provocar, se siente frustrada y avergonzada, por lo que provoca somnolencia en los moradores, que deciden recostarse en sus lechos de descanso y dormir, todo sea para que muchos de ellos no vean su fatídica retirada.


Restos del aguacero se dejan ver deslizándose por las hojas, calaminas, tejados o ventanas de viviendas, y uniéndose a otras en pequeños charcos, disfrutando sus corto tiempo de vida; pues saben que el reloj volverá a traer a un rey que acabará con todas sin misericordia y reinará en la ciudad una vez más; obteniendo así su venganza.


STOP!
Extraño/a, si llegaste hasta aquí leyendo todo lo anterior (y no solo bajando la barra), pues... ¡gracias! en serio, has logrado soportar uno de mis berrinches literarios, por eso me siento contento y agradecido. 

Los dejo con Charlie Brown de Coldplay, genial para seguir la madrugada. Fue lanzado en noviembre del 2011 como tercer sencillo del álbum Mylo Xyloto. En el vídeo podrán notar que una canción de estos británicos puede llegar a ser tan bailable como la Macarena (antes solo eran cortavenas).

Les escribió Joss!, alérgico a todo. ¡¡¡Hasta la próxima!!!





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Grandes cosas...

De niño, el soñaba con lograr grandes cosas.
Creía que podía cambiar el mundo 
tan solo con enfrentar su miedo interior.
Por ello en el kinder soñaba con ser un comando 
y combatir el mal como en las películas de Schwarzenegger, Norris o Stallone. 

No obstante, le dijeron que no ganaría mucho dinero
por lo que decidió ser un investigador privado
como el protagonista de un juego que había jugado
así vencer a los malos con astucia
a la vez que acumulaba una fortuna nada sucia.

Mientras se hacía adolescente, sus ánimos cambiaron
y se decidió por otro oficio.
Quiso ser veterinario, 
recoger a los animales heridos
y liberarlos cuando sea propicio.

Empero, la sangre le causaba serios problemas alimenticios,
por lo que quiso ser periodista.
e informar sobre los problemas de la sociedad,
hacer grandes destapes
o realizar interesantes entrevistas.

Ya de joven también quiso ser un escritor,
uno bueno, que pueda cautivar al lector.
Sobre sus sueños quería escribir,
halagos del publico deseaba recibir
y así demostrar que podía ser mejor de lo que podía decir.

Trabajó mucho por lograr cada una de sus metas
Sus padres siempre lo apoyaron
él crecía soñando con lograr grandes cosas
el quería ser un líder de opinión
él deseaba ser el héroe de su generación.

Pero la vida no siempre es grata
él no pudo recorrer los caminos que se propuso
él nunca lo logró
nunca ganó nada
nunca sobresalió
él fue una decepción
su familia se perdió
su madre lloró
él en un abismo cayó.




¡Hola extraño/a! Si estas leyendo esto, ¡felicidades! ¡¡¡¡acabas de ganar 1500 dólares!!!!... 
Jaja es broma. Si estas leyendo esto, estas leyendo el inicio de mi blog, el primero que hago por decisión propia y no porque me lo pidieron en algún curso de la universidad. Lo hago porque necesito escribir monadas en algún lado. No lo hago en Facebook porque me hacen bullying, además que me parece demasiado posero. No lo hago en Twitter porque a veces 140 caracteres solo me sirven para describir un maní. Así que preferí este lugar. Aquí en mi humilde blog, que de seguro tendrá cero visitas por al menos un mes, escribiré las monadas que se me ocurren por las noches después de un día agitado; las que pienso en las frías y solitarias madrugadas; en las cansadas y bochornosas mañanas; o en las nostálgicos y románticos ocasos. Espero no perder el ritmo a esta página, por lo que desde ahora me haré un horario para postear entradas. 

He empezado con algo que odio (no todo puede ser perfecto), los poemas; no soy hincha de la poesía porque lo veo tan aburrido como cantar sin acompañamiento musical. Sin embargo, reconozco que hay algunos que logran endulzarme, como aquellos que son crudos y no maquillan mucho sus versos con metáforas. En fin para gustos y sabores...

Los dejo con Maybe i can change, que es una de mis canciones favoritas de la banda británica Keane. Esta canción es el B-side proveniente del sencillo Crystal Ball, el cual fue lanzado en agosto del 2006. Lástima que por ser una cara B no tenga un video oficial.

Les escribió Joss!, lector de comics. ¡¡¡Hasta la próxima!!!